14 may 2011

Autorretratos cubistas

Piscasso y los cubistas creaban imágenes en las que literalmente destruían la realidad y la volvían a reconstruir de una forma diferente. Para esto utilizaban una desestructuración del espacio mediante la utilización de distintos puntos de vista de un objeto en una sola imagen; así, en un retrato cubista podíamos encontrar, por ejemplo, un ojo visto de perfil, otro de frente, una nariz desde abajo, etc.

Vamos a convertirnos en cubistas por unos días y a realizar nuestros propios autorretratos. Para ellos necesitaremos unas cuantas instantáneas de nuestra cara desde distintos puntos de vista, para luego coger la parte de cada una que más nos interese.

He de decir que los resultados en algunos casos han sido excelentes: no sólo se han conseguido efectos plásticos muy ricos e interesantes, sino que además (y esto es lo más importante) algunos habéis conseguido reflejar vuestra personalidad en un trabajo que en realidad se parece bien poco a vosotros. Bravo. Esto demuestra el gran poder que tiene la imagen, y que a veces, para describir visualmente una persona, un estado de ánimo, o cualquier otra cosa o idea, no es para nada necesario usar una imagen explícita, como puede ser una simple foto. Personalmente creo que es mucho más bonito y estimulante conseguirlo por otros medios menos convencionales, como ha sido el caso.